Una pastorcilla ayudaba a cuidar el rebaño de su familia, en unos campos cercanos a Belén. Buscaba una pequeña oveja que se había extraviado y subió por una ladera. Al mirar hacia abajo, advirtió mucho movimiento entre los otros pastores y vio como se apresuraban en dirección al pueblo.
Temiendo alguna desgracia, la niña bajó corriendo a preguntar que pasaba y a dónde iban con tanta prisa. Un pastor que la conocía le contestó:
--Vamos a ver al niño que ha nacido en un establo en Belén. Ya estuve allí esta noche pasada y pude ver que es realmente el hijo de Dios. Ahora voy a llevar a su madre una taza de miel.
Y la niña vio que todos los pastores que iban hacia el establo llevaban algún pequeño obsequio en sus manos; quién un un poco de queso, quién un trozo de pan, quién un jarro de leche.
¡Y ella no tenía nada...! Quería ir a ver el milagro, quería ver al niño, pero no quería ir con las manos vacías. Su padre ya había recogido toda la leche, ella se había comido todo el queso y el pan que le dejaron para el almuerzo... No, no tenía nada que llevarle y le daba mucha pena y mucha verguenza no poder hacerle una pequeña ofrenda.
Y se sintió tan acongojada que no pudo evitar que la lágrimas corrieran por sus mejillas.
Y entonces una luz muy brillante apareció ante ella y oyó una voz dulce y serena que le decía:
--Ven conmigo.
Y la luz se acercó a una gran roca y allí, junto a la piedra, surgiendo de la nieve, había una preciosa planta cubierta de flores blancas.
La niña gritó de alegría; Ya tenía un regalo que llevar al establo!.
Recogió las flores tan de prisa como pudo y con ellas en la mano corrió hacia el portal y con una gran sonrisa, se las entregó a María.
Y el niño Jesús también le sonrió a ella desde su cuna de paja.
"Cuento de navidad"
"AMOR PURO AMOR"
jueves, 9 de diciembre de 2010
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"MUÑECA DE TRAPO"
"Muñeca de trapo,
bella cuando era nueva
hoy tirada en un rincón
con lazos descoloridos
ojos de un triste mirar.
¿Quién en ese estado te dejo?
¿Quién tu belleza no supo valorar?
¿Quién te dejo tirada en un rincón?
¿Quién rompió tu corazón
muñeca de triste mirar?
Vestida de tul raído por el uso
mejillas coloradas,
aun estando abandonada
quizá por vergüenza
de estar botada en un rincón.
Ya tu dueña te dejo
por otra muñeca nueva
¿De qué sirve quejarse
del destino que te toco?
¿muñeca de triste mirar?.
Esa era la queja de una muñeca de trapo, cuando vio que su dueña la cambio por una muñeca nueva y la dejo en un desván, era una muñeca de ojos verdes y una mirada que destrozaba el corazón, tenia las trenzas desechas, el vestido sucio, descalza pero aun así conservaba su belleza. Pero pasado los años, cuando su dueña, que ya era toda una señorita, al limpiar el desván la encontró y recordó lo feliz que fue con aquella muñeca, dijo: ¡Así como yo fui feliz contigo, así que sea feliz otra niña!, la tomo entre sus manos , lavo a la muñeca, la peino y le puso lazos nuevos en sus trenzas, cambio el vestido viejo por otro nuevo y le puso zapatitos de gamuza. La llevo a un orfelinato para donarlo, pasado un tiempo en el cumpleaños de una niña abandonada, fue envuelta en papel de regalo, la muñeca quedo a oscuras hasta que escucho la voz de su nueva dueña, una niña inocente de cinco años, feliz de tener una muñeca de trapo, desde aquel día la muñeca de triste mirar, tenía el corazón contento porque aprendió que su destino era hacer feliz a las niñas sin importar que cuando crezcan la abandonen en un rincón.
Este cuento es mi aporte a la niñez espero que sea del gusto de ellos. No soy escritora pero es lo que me nace y lo pongo en estas lineas. (Ana Salazar)
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